A priori puede tratarse de una situación más, desesperante en muchos casos, pero obligada para aquellos que acostumbren a usar transporte público. Porque una parada de autobús no es más que dos o tres paredes de cristal y un techo, ¿o quizá no?
Lo cierto es que desde hace algunos años hasta aquí, la transformación y el
aprovechamiento de elementos del entorno o espacios urbanos de lo más comunes en clave publicitaria ha
crecido a pasos agigantados.
Y las paradas de autobuses parecen ser realmente codiciadas para creativos y planificadores de medios, siendo estructuras con una alta frecuencia de exposición, por una parte, y fácilmente customizables, por otra. Aunque, como siempre, el presupuesto es el que manda. Difícilmente sea casualidad que sólo las grandes marcas tengan "sus" paradas de autobús.
Os dejo algunos ejemplos, algunos más espectaculares que otros, para admirar estas piezas de mobiliario urbano. ¿Quién lo iba a decir?
 |
| Absolutamente cítrica esta parada. |
 |
| Con Ikea, ¡como en casa! |
 |
| Esta vez tocaba refinarse con la variante roja de este vodka. |
 |
| Los que allí se dieron cita le agradecerían a GolTV la espera. |
 |
| ¡Sólo falta la manzanilla! O el botellín... |
 |
| La Sureña se apunta un tanto "gracias" a Cruzcampo. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario